La sopa borsch, también conocida como sopa de remolacha, es una receta cargada de antioxidantes, fibra, vitaminas y minerales esenciales para nuestro cuerpo.
Dicha receta, originaria de Ucrania, aunque suele servirse con crema agria o yorgut, admite un sinfín de variaciones y es perfecta como entrada o, incluso, plato fuerte en nuestro menú.
Específicamente, el consumo de remolacha es ideal para el proceso digestivo, por lo que es ampliamente recomendada contra el estreñimiento. Además, es muy baja en calorías, aporta vitaminas A y C y minerales como calcio y hierro, este último ideal para personas que padecen de anemia.
Asimismo, se trata de un vegetal con elevada concentración de nitratos, los cuales favorecen la salud cardiovascular, ya que ejercen un efecto vasodilatador, reduciendo así la presión sanguínea.
A continuación, te explico el paso a paso para que puedas preparar tu propia sopa de remolacha:
Ingredientes:
- 3 remolachas cocidas.
- 1 puerro picado.
- 2 o 3 dientes de ajo machacados.
- Laurel al gusto.
- El zumo de medio limón.
- Tomillo.
- Aceite de oliva extra virgen.
- Sal.
- Agua.
Preparación
1. Pela las remolachas y córtalas en cubos pequeños.
2. Coloca en un sartén el aceite de oliva y cuando esté caliente sofríe el puerro durante unos 6 minutos. Transcurrido este tiempo incorpora los ajos y cocina por dos minutos más, con mucho cuidado para que los ajos no se quemen.
3. Añade las remolachas, el laurel, el tomillo y el agua.
4. Lleva a ebullición y cocina a fuego lento durante 5 minutos.
5. Apaga el fuego, retira la hoja de laurel y sazona con sal y pimienta.
6. Vierte todo el contenido en un recipiente apto para batidora y tritura hasta lograr una textura fina.
7. Una vez triturado puedes pasar la preparación por un colador para que no quede ningún tropezón.
