María Eugenia Baptista Zacarias: Reduce el consumo de sal

Comer es algo que les encanta a todos, pero, en ocasiones, existen personas que abusan con el consumo excesivo de ciertos alimentos y especias; lo cual a futuro trae como consecuencia algunos problemas de salud y enfermedades que deben prevenirse a tiempo. 

Tal es el caso de la sal, que a pesar de estar incluida en la gran mayoría de las comidas, se encuentra de forma natural en la leche, nata, huevos y carne; aumentando el riesgo de infartos y accidentes cerebrovasculares.

 ¿Cuánto debo consumir?

La recomendación general es que no se deben tomar más de 2.3 gramos de sodio al día. Eso equivale aproximadamente a una cucharadita de sal diaria. Para dar una idea, lo habitual en la dieta es alrededor de 8 gramos de sodio al día. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS):
  • Adultos. Consumir menos de 5 gramos (un poco menos que una cuchara de té) de sal por día.
  • Niños. Ajustar a la baja, para los de 2 a 15 años, ingesta máxima recomendada para los adultos en función de las necesidades energéticas.

¡Lee las etiquetas!

Siempre es importante familiarizarse con la información nutricional que tienen los empaques de comida para conocer su fecha de vencimiento, productos que contiene y cantidad de sal. Así sabrás, la porción que debes consumir para mantenerte saludable. Aunque es indispensable para nuestro organismo, es fundamental no abusar de ella. 

El sodio es necesario para mantener los volúmenes de líquido en el cuerpo y para la conducción de impulsos eléctricos en la celular. El equilibrio de sodio entre el interior y exterior de las células es importante para conservar los niveles de ciertas hormonas.      

Efectos nocivos para la salud

Es una de las principales causas de hipertensión; lo cual es un factor de riesgo de enfermedades no transmisibles como el infarto, patologías renales, accidentes cerebrovasculares y obesidad. 

También, se encuentra ligado a padecimientos como osteoporosis, litiasis renal, cáncer de estómago y retención de líquidos. Lo principal es que cambies tus hábitos alimenticios para que estés saludable y seguir algunos de estos consejos:
  • Eliminar el salero de la mesa.
  • Controlar la cantidad que se utiliza durante la preparación de alimentos.
  • Leer las etiquetas de los empaques para seleccionar los que contengan menos sodio.
  • Sustituirla por otras especias que den sabor a la comida.
  • No añadirla en el cocinado, sino cuando la comida esté lista.
  • Controlar su consumo desde la infancia.