María Eugenia Baptista Zacarias: ¿Por qué debemos comer tomates?

El tomate es un vegetal redondo y rojo conocido en todas las cocinas del mundo. Tal es su popularidad, que es un ingrediente primordial en muchos platos. 

Además, funciona como un antioxidante del organismo y hasta puede llegar a combatir el acné.

Este alimento es conocido también como jitomate o tomate rojo. Su uso principal, no solo por el colorido que aporta a los platos, es que potencia el sabor de otros alimentos como especies del tipo de cherrycerezaguajesaladerjitomatillo.

Las nutricionistas coinciden en que el tomate es un alimento con altas cargas nutricionales con una presentación refrescante para el paladar. Hasta apuntan que el consumo de este vegetal aporta elevados niveles de fibra al cuerpo humano por su composición de agua y pocas calorías.

“Tiene vitaminas A, C y E, las cuales se consideran como antioxidantes que favorecen la actividad inmunológica. Su contenido en potasio ayuda a la correcta contracción muscular, a mantener hidratado el cuerpo, y a evitar la presencia de dolores o calambres por deficiencia de este nutriente”, refiere un experto en nutrición.

También destaca los niveles de licopeno que contiene el tomate. Este es un antioxidante importante que pertenece al grupo de los betacarotenos. Este antioxidante es el encargado de proporcionar el color rojo al vegetal y son los mismos que se encuentran en otros alimentos como la papaya y la zanahoria.

“El jugo de tomate crudo ayuda a limpiar la piel y los órganos, aunque lleva más contenido de sodio. Es rico en ácido fólico, el cual sirve para prevenir defectos congénitos, por ello, se recomienda a mujeres embarazadas. Se recomienda consumirlo para reducir las molestias durante el período menstrual”, comentan las nutricionistas.

El tomate es rico en licopeno, un agente que ayuda a prevenir ciertos tipos de cáncer como el de útero, próstata y estómago.

Por su parte, la presidenta de la Fundación Mexicana para la Dermatología comenta que aplicar tomate directamente a la piel:

“se le atribuye una acción astringente, va a reducir la grasa, y por eso se usa frecuentemente en el acné, aunque en algunas personas puede provocar reacciones alérgicas si se tiene piel sensible”.